Igualdad.

Para poder usar el término igualdad correctamente deberíamos saber cuál es exactamente su significado. Según encontramos en la enciclopedia wikipedia “la igualdad social es una situación social según la cual las personas tienen las mismas oportunidades o derechos en algún aspecto así para que todos tengan las mismas oportunidades en una sociedad y vivir equitativamente y en paz”, esto se encontraría reflejado en “La dignidad de la persona, los derechos inviolables que le son inherentes, el libre desarrollo de su personalidad, el respeto a la ley y a los derechos de los demás son fundamento del orden político y de la paz social”, Artículo 10.1 de la Constitución Española.

Durante muchos años la sociedad ha discriminado – y sigue discriminando – a diferentes razas, un ejemplo muy notable de esto es la segregación racial, que ha sido practicada hasta mediados del s. XX en países como Estados Unidos. El caso de este país es muy curioso ya que en la Declaración de Independencia Americana de 1776 podemos encontrar “Todos los hombres nacen iguales y su Creador les ha dotado de ciertos derechos inalienables entre los que se encuentran la vida, la libertad y la búsqueda de la felicidad”, cosa que personas como Martin Luther King lucharon por cambiar ya que como podemos ver, no fue llevado a la práctica.

Como el caso de la segregación racial producida en Estados Unidos hay muchos casos más. Las personas tenemos todas los mismos derechos porque… ¿por qué debería tener yo derechos que otra persona no tuviese y viceversa? Uno de los derechos de los que disponemos es el derecho a la libertad, aunque esto es relativo ya que mi libertad acaba donde empieza la de los demás; como dijo Locke en 1689 “Nadie debe perjudicar a otro en su vida, salud, libertad o propiedades”.

 “Originariamente los hombres eran seres iguales y libres por naturaleza, las diferencias de rango, riqueza o poder lo convirtieron en un hombre social egoísta y competitivo” afirmó Rousseau y tiene toda la razón, porque actualmente vivimos en una sociedad en la que todos hacen lo que sea por ser más que cualquier otra persona, hay personas que se fijan una meta y les da igual las cabezas que tengan que cortar para conseguirla y el daño que puedan infligir.

Herder afirmó “Lo que le da unidad a la vida y a la cultura de un pueblo son los hombres puros y originarios de ese pueblo”, pensamientos como este son los que hacen que muchas personas cometan barbaridades, barbaridades como el Holocausto o “Solución Final al problema judío” (Endlösung der Judenfrage), plan nazi para llevar a cabo el genocidio sistemático de la población judía europea durante la Segunda Guerra Mundial. Esta afirmación de Herder queda anulada por escritos como “No se hará distinción alguna fundada en la condición política, jurídica internacional del país o territorio de cuya jurisdicción dependa una persona”, perteneciente a la Declaración Universal de los Derechos Humanos en 1984, el concerniente al Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos de 1966 “Toda persona tendrá derecho a salir de cualquier país, incluso del propio” y lo apuntado en la Carta Social Europea de 1961, “Los países del consejo de Europa se comprometen a garantizar a los trabajadores que se encuentran legalmente dentro de su territorio un trato igual que a los ciudadanos nacionales”.

También debemos respetar las opiniones de los demás, aunque no las compartamos, y lo mismo con las prácticas… debemos ser tolerantes, “Una amplia tolerancia es esencial tanto para el progreso científico y social como para el desarrollo moral y espiritual del individuo”, así lo dijo John Stuart Mill en 1859.

Las personas debemos interactuar todas juntas, debemos estar unidos contra las adversidades, para así poder luchar por nosotros mismos y formar instituciones y organizaciones que luchen por nuestros derechos, ya que como dijo Richard Henry Tawney  “Debido a que los hombres son hombres, las instituciones sociales deben ser diseñadas para resaltar y reforzar la humanidad común que les une, no las diferencias que los separan”.